Controlar las cantidades, cambiar algunos alimentos por otros menos calóricos y moverse son algunas claves.
1 Picar
De vez en cuando, puedes romper la rutina incorporando a tu dieta plátanos o palomitas de maíz, que tienen más fibra y menos calorías que los caprichos como bizcochos o tartas bajas en grasa. Te saciarás más con menos comida. 2 Comer
¿Te falta tiempo? Toma alguna vez platos precocinados. Es una alternativa acertada si controlas el tamaño de las raciones. También son una buena opción las verduras congeladas, y resultan más ligeras.
3 Cenar
Retrasa 1 hora la cena, de esta forma evitarás los ataques de hambre que te llevan a asaltar la nevera de madrugada. Cuando termines de cenar, recoge inmediatamente la mesa y lávate los dientes enseguida.
4 Beber
Todos los días hay que beber al menos un litro de agua. Lo mejor es que te pongas una botella o una jarra en la mesa o cerca de donde estés trabajando. Te hidratará, te ayudará a disminuir el apetito y mejorará tu salud.
5 Entrena a diario
Cuanto más dure el entrenamiento más eficaz resultará, sobre todo si tu objetivo es quemar el máximo de calorías. Vete aumentando el esfuerzo día a día. Cada vez te costará menos y obtendrás mejores resultados.
6 Nadar, andar...
Si te aburre pedalear en la bicicleta estática, ten en cuenta que también tus músculos se aburren. Hay que variar los ejercicios para que trabajen todos los músculos por igual y quemar calorías de distintas zonas. Prueba a nadar, caminar o incluso hacer lucha.
7 Levantar pesas
Al perder peso, el metabolismo se ralentiza; para evitarlo conviene aumentar la masa muscular, ya que los músculos queman más calorías que las grasas. Realiza ejercicios con pesas en brazos y piernas dos veces por semana.
8 Ajustar las cantidades
Si quieres reducir la cantidad de comida que consumes, una balanza de precisión te ayudará a pesar los alimentos. Ajústate siempre a cantidades razonables, aunque con las frutas y verduras puedes ser más generosa. 9 Cambiar los hábitos de vida
Te encantaría hacer deporte, pero el gimnasio está lejos. No te preocupes, puedes ponerte en forma de la forma más fácil: deja el coche, camina, muévete en transporte público y sube las escaleras en vez de usar el ascensor. 10 Intensificar el ejercicio
Intercala sesiones breves de ejercicios intensos en tu programa habitual de gimnasia. Incluye una breve carrera muy intensa cuando estés corriendo o pedalea más rápido unos segundos en la bicicleta. Estos gestos multiplican el gasto energético.
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